IMAGO - Parte II
Escuchando: Alanis Morrisette
He borrado sus mensajes, su teléfono, su sonrisa y el sabor de sus caricias, me he prohibido los sueños, las ilusiones y los acercamientos.
Él le replica que Él no tiene imago, que se enamora de personas muy diferentes, y ella le dice que todos tenemos una imago y que Él también tiene una, aunque no lo sepa, de la misma forma que todos soñamos pero sólo algunos somos capaces de recordar nuestros sueños.
Cuando aparece una Imago mi irracionalidad la señala, la hace objetivo, objeto y deseo, desde entonces todas las acciones de mi cuerpo serán por y para conseguirla. Entonces empieza una pelea conmigo misma donde ansío y no quiero, donde me arrastro y me enfado conmigo misma, me reprocho y me replico, y acabo convertida en la [yo que avanza] y la [yo que llora], en la [yo que arriesga] y la [yo que sabe que acabará perdiendo].
Él no suele enterarse nunca de nada. Imago me tiene que haber dicho que no quiere relaciones, que ya tiene una, que no le interesan las mujeres o cualquier otra cosa parecida, porque, si fuera fácil, o incluso posible, entonces no seria Imago. Luego yo despierto su curiosidad, viene, se aleja, viene me alejo, y yo voy siendo atrapada en cada intento de atraparla, hasta que se queda, esta es la parte mas placentera y la que más duele, tener a Imago, poseerla, hacerla mía, siempre aprovecho estos momentos, la recorro a besos y guardo su sabor, la abrazo y la acaricio para fundir su cuerpo con mil huellas, yo robo su cariño y ella me toma, sé que me utiliza, que se burla de mi, pero yo aspiro sentimiento y me nutro, y busco mi reflejo en sus ojos, y me veo mirándola, y sonrío porque he ganado una vez más, aunque sepa, que a la mañana siguiente, ganará ella, entonces Imago se marchará, y yo, volveré a quedarme vacía, tumbada en su lado de la cama, y arrepintiéndome por haber vuelto a caer.
Desde que me di cuenta de todo eso, cada vez que consigo a Imago y la oigo dormir a mi lado, me acurruco en su pecho y lloro, sola entre sus brazos, con su respiración en mi nuca y rogando en silencio estar equivocada, y que no sea Imago, y que no se acabe la noche y que no me enamore.
He borrado sus mensajes, su teléfono, su sonrisa y el sabor de sus caricias, me he prohibido los sueños, las ilusiones y los acercamientos.
Él le replica que Él no tiene imago, que se enamora de personas muy diferentes, y ella le dice que todos tenemos una imago y que Él también tiene una, aunque no lo sepa, de la misma forma que todos soñamos pero sólo algunos somos capaces de recordar nuestros sueños.
Cuando aparece una Imago mi irracionalidad la señala, la hace objetivo, objeto y deseo, desde entonces todas las acciones de mi cuerpo serán por y para conseguirla. Entonces empieza una pelea conmigo misma donde ansío y no quiero, donde me arrastro y me enfado conmigo misma, me reprocho y me replico, y acabo convertida en la [yo que avanza] y la [yo que llora], en la [yo que arriesga] y la [yo que sabe que acabará perdiendo].
Él no suele enterarse nunca de nada. Imago me tiene que haber dicho que no quiere relaciones, que ya tiene una, que no le interesan las mujeres o cualquier otra cosa parecida, porque, si fuera fácil, o incluso posible, entonces no seria Imago. Luego yo despierto su curiosidad, viene, se aleja, viene me alejo, y yo voy siendo atrapada en cada intento de atraparla, hasta que se queda, esta es la parte mas placentera y la que más duele, tener a Imago, poseerla, hacerla mía, siempre aprovecho estos momentos, la recorro a besos y guardo su sabor, la abrazo y la acaricio para fundir su cuerpo con mil huellas, yo robo su cariño y ella me toma, sé que me utiliza, que se burla de mi, pero yo aspiro sentimiento y me nutro, y busco mi reflejo en sus ojos, y me veo mirándola, y sonrío porque he ganado una vez más, aunque sepa, que a la mañana siguiente, ganará ella, entonces Imago se marchará, y yo, volveré a quedarme vacía, tumbada en su lado de la cama, y arrepintiéndome por haber vuelto a caer.
Desde que me di cuenta de todo eso, cada vez que consigo a Imago y la oigo dormir a mi lado, me acurruco en su pecho y lloro, sola entre sus brazos, con su respiración en mi nuca y rogando en silencio estar equivocada, y que no sea Imago, y que no se acabe la noche y que no me enamore.
9 comentarios
Paridaman -
Zol -
Ame -
Juank -
Ena -
Polux -
Bestia -
lagrimaescrita -
lagrimaescrita -
pero me gusto mucho, me gusta como escribes.